Qué rollo es el rock

Engendro en La  Mala (08.01.10)

El pasado viernes 8 de enero, la emisora Onda Latina, radio libre madrileña, organizaba en el café concierto La Mala un nuevo directo de Engendro, la autodenominada banda de versiones mejoradas, proyecto paralelo de Juan Abarca (Mamá Ladilla). Engendro es una banda exclusivamente de versiones. Eso si, de canciones de todo tipo, la banda machaca tanto el rock español, versionando temas como El amor del calor en un bar, Sin documentos, Santa Lucía o La senda del tiempo, como hits del rock y el pop internacional: Light my fire, Won't get fooled again, Video killed the radio star... Sin olvidar por supuesto nuestro legado más cañí y hortera con clásicos como Y viva España o Como una ola. Engendro, con Juan Abarca como cabeza pensante, se mofa de algunas canciones y otras simplemente las usa como base para dar rienda suelta a su imaginario, a veces corrisivo y transgresor, a veces simplemente absurdo.

El aforo de esta pequeña sala de Aluche no tardó demasiado en completarse y cerca de las once de la noche el concierto daba comienzo. Pero antes, una mención especial para el público, y es que Engendro reúne a un grupo de gente muy dispar, lo que resulta muy curioso. Adolescentes fans de Slipknot, treintañeros de la vieja escuela, parejas en la cita menos romántica imaginable y gente aparentemente alejada del rock, que se toman este tipo de conciertos como un clásico monólogo, buscando poco más que el humor. Todos unidos por la causa de Engendro, y todos gravemente afectados a consecuencia de ello. Los efectos secundarios son siempre los mismos, ninguno de ellos podrá volver a escuchar la sentimental No dudaría de Antonio Flores sin reírse por dentro.

Javier Álvarez

Resulta chocante, por otra parte, el fenómeno fan que se está creando con Engendro, aplicable también a otras bandas del estilo, como Los Gandules. Y es que quizá lo mejor de estas formaciones sea el efecto sorpresa que producen sus letras, el golpe inesperado de una frase genial y desternillante sustituyendo a los textos reales de canciones populares. El pasado viernes en La Mala, el público pedía desde el principio canciones como Manuel Machado o Lidl, dos de las versiones más logradas, que como era de esperar resultaron ser dos los mejores momentos de la noche, con el público entregado, o perjudicado, coreando cada estrofa.

Quizá de este modo para algunos deje de ser tan divertido. Afortunadamente, Engendro se renuevan contínuamente. La banda, por definición una formación de directo, añade cada cierto tiempo nuevas canciones al repertorio. La creatividad de Juan Abarca es asombrosa, con una gran capacidad para el humor. Pero sería un gran error pensar que simplemente es un humorista, pues lo suyo tiene mucho más mérito. Ya ha demostrado su valía como compositor con Mamá Ladilla durante más de una década y musicalmente es un genio de las seis cuerdas, un virtuoso. Precisamente, las pocas veces que se suelta con Engendro, limitado seguramente por la poca calidad de las canciones originales, deja una sensación agridulce, nos deja con ganas de más. En directo completan la banda Javier Álvarez al bajo, Javier Gómez a la batería y Arturo Ballesteros al sintetizador, éste último indispensable para dar forma a la mayor parte de las melodías que interpretan. Engendro se volvieron a llevar al público de calle, que tras un doble bis aún pedía más.

Texto y fotografía de Bruno Corrales