No temáis por mí (Guitar Town, 2010)
Hendrik Röver
Más de 20 años de carrera con Los Deltonos, experimentos sonoros tanto dentro de su propia banda como en proyectos paralelos, evolucionando y probando con nuevos estilos por puro amor por la música, unidos a la creación de un estudio de grabación propio y un sello discográfico, que garantizan independencia y honestidad. Muy a grandes rasgos esta es el curriculum de Hendrik Röver, que con el tiempo ha convertido cada movimiento suyo en una buena noticia. Hace dos años decidió lanzarse en solitario con un proyecto de canciones sencillas, desnudas de acompañamientos eléctricos, que por su propia naturaleza no encajaban del todo en el seno de Los Deltonos. El cántabro lanzó Esqueletos, que fue acogido con entusiasmo por sus seguidores, y ahora vuelve con una segunda entrega, No temáis por mí.
Vuelve con otra nueva colección de canciones de rock y folk acústico, un lugar en el que ha demostrado sentirse muy cómodo tras pasar por estilos tan diversos como el blues, el powerpop o el hard rock. Sus letras, aspecto en el que ha mejorado notablemente, hablan de decisiones difíciles, de idas y venidas, de cansancio y resignación pero también de maneras de desaparecer y empezar de cero. Dando forma a canciones que son pequeñas historias en primera persona.
Temas como Tornados reivindican de nuevo el espíritu inicíatico de su aventura en solitario, por el cuál una buena canción se sostiene perfectamente con lo mínimo. Pero también hay lugar para arranques eléctricos como al comienzo de Lo siento, con un poderoso riff. Resulta curiosa la forma en la que Röver parece arriesgar con la voz en este nuevo álbum, llegando a tonos agudos en los que no se suele mover, caso de temas como Sol. También hay momentos realmente íntimos y sosegados como es Adiós, aunque también todo lo contrario.
Y quizá esto suene ridículo, pero es difícil no acordarse de todos esos ridículos anuncios de colonias y pasta de dientes que prometen transportarte a lugares paradisíacos. En cambio, la música de gente como Hendrik Röver sí garantiza un viaje. Escucharle es sentarse en un porche y ver atardecer, o perderse conduciendo en carreteras secundarias. Y si, suena ridículo, pero solo hay que sumergirse realmente en la música para comprenderlo, entiendiéndola como un fin en sí mismo, y no como mero acompañamiento.
Ahora venís es una reivindicación de lo natural ante las cada vez más preocupantes comodidades que las nuevas tecnologías e internet nos han traído. Y es que es una constante en las canciones de Hendrik Röver la creación de paisajes idílicos, alejados del tumulto y conectados con la naturaleza. Con En resumen llega el epílogo de este segundo álbum en solitario del cántabro, que es una despedida disfrazada de canción. Pero esta vez hay más, y muy recomendable. El disco en su primera edición se acompaña de otro cd con seis canciones adicionales interpretadas junto a la West Bluegrass Band. Es decir, Agustín Zubiaga al bajo, Charly Gómez a la guitarra, José Gutiérrez al bajo, Javi García a la mandolina a la que el propio Hendrik Röver acompaña encargado de la voz, la guitarra y el dobro. Estas canciones fueron grabadas también en Guitar Town de una forma muy natural, con toda la banda y Hendrik Röver en corro, como se puede ver en el video dirigido por Fernando Macaya para la ocasión, siendo por lo tanto registradas en directo casi en su totalidad.
En definitiva, un disco de los que merecen realmente la pena diseccionar con calma. Hay recompensa.
Texto de Bruno Corrales
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