Carcajadas sinestésicas

Mundo Idiota Animado: Mamá Ladilla + Los Gandules en Rockitchen (09.03.13)

El pasado sábado 9 de marzo los organizadores del Festival Mundo Idiota organizaban un sarao muy especial, un concierto en el que la vista importaba lo mismo que el oído, y en el que las risas que envuelven todo lo que estos chicos organizan provenían no solo de la música sino también del dibujo. Ahí lo tienen: El Mundo Idiota Animado. El guateque contaba con las actuaciones de Los Gandules, ilustrados por Alberto Calvo (Supermaño, El Víbora…) y Mamá Ladilla, con Paco Alcázar (Silvio José, La Industria de los Sueños…) a los rotuladores y su bajista primigenio, el tío Llors, a las cuatro cuerdas.

Los primeros en salir al escenario de la Sala Rockitchen fueron Los Gandules, y lo hicieron como lo hacen siempre: Tarde (aunque esta vez no fue culpa suya, sino del retraso ocasionado en la puerta para que entraran todos los asistentes) y disfrazados de sus propios teloneros, Escafandra, que ofrecieron su singular repertorio de canciones con la misma base electrónica, voz nasal y aspavientos. Al finalizar, Los Gandules cambiaban los chubasqueros y las gafas de bucear por sus batas de andar por casa y tomaban asiento en su sofá para lanzar, ya bien cómodos, su repertorio habitual de versiones mejoradas: De Agujeros en Montañas (versión de Love Story, de Andy Williams), Cleptocupromano de Guante Blanco (Amor de Hombre, de Mocedades), Cuídame al Gato (We Are The Champions, de Queen), Los Remedios de la Abuela (Felicidad, de Al Bano y Romina Power)... 

Los Gandules

Mientras los maños destrozaban a su manera el cancionero popular, Alberto Calvo gamberreaba con los rotuladores, bien complementando las canciones del dúo con dibujos o frases, o bien dibujando a algunos de sus personajes más reconocibles, haciendo que el público estuviera más pendiente de la pantalla que de los propios Gandules. Es más, los propios Gandules miraban más, en ocasiones, a lo que se traía entre manos el dibujante (“lo bueno de que sea zurdo es que se tapa y mantiene el suspense”, decían) que al auditorio.

Tras la amalgama de versiones de La Década Apestosa Mix, Los Gandules se despedían y llegaba el turno a Mamá Ladilla, que recuperaban temporalmente su formación original. El power trío aprovechó la ocasión para deleitar a los acérrimos con algunos esos temas que no suenan igual sin los coros del Tío Llors, como su versión del Hallelujah de Haendel, Hijo Puta, o los estribillos de Mi Nave Mix. A pesar de que debido al retraso inicial tuvieron que recortar repertorio, los madrileños se marcaron un genial repaso por su discografía en el que no faltaron himnos como Janfri Güein, con la que abrieron la actuación, Surfin Papa, Primavera (elegida por aclamación popular), Sancho Panza del Rock, la “colaborativa, como los bukkakes”, según Llors, Sucedió en Beckelar o el apoteósico cierre de Chanquete Ha Muerto + Ataca, en el que a los pogos del público se unía el bailoteo del dibujo de Chanquete, en el proyector, por parte de Paco Alcázar.

Mamá Ladilla

El ilustrador supo integrarse a la perfección con la banda realizando, a una velocidad sorprendente, dibujos a todo color de las canciones, en los que se dejaba ver gran complicidad entre el artista y el grupo. No es de extrañar, teniendo en cuenta que no es la primera vez que Alcázar colabora con Mamá Ladilla: El dibujante ya realizó una ilustración para el libreto del Jamón Beibe que se convirtió, a su vez, en una célebre camiseta de la banda. Efectivamente: la que Juan Abarca lució en este festival, en el que uno ya no sabía si reía de las imágenes que escuchaba o de las canciones que veía.

Texto y fotografía de Pablo Cantó