Etiquetas: ,

Salvaje Montoya: Locura extraordinaria

“¿Habláis nuestro idioma?”, se preguntaba el aquí bajista Miguel Ángel Blanca (le conocéis, canta en Manos de Topo) ante la escasa audiencia de valientes que asistía el pasado 22 de marzo a la presentación del primer largo de Salvaje Montoya en Wurlitzer Ballroom. Algo fallaba, ya sea por nuestra timidez, por la escasez de sangre en esas madrileñas venas o por nuestra habitual dispersión, ya sea porque suele ser lo normal para una banda así de reciente durante sus primeros pasos fuera de casa (nota: hablamos de cuatro forajidos que vienen de Barcelona, que es muy bonita, dos cosas que nos van a dejar muy claras en sus canciones).

El caso es que, por nuestra parte, y como somos muy de contestar a preguntas retóricas, la respuesta sería algo así como: “¡estamos en ello!” o “espera un momento, me termino de ubicar y te juro que voy”. Porque no es sencillo, que estos Salvaje Montoya imponen. Llegan en enero con un primer largo titulado Boda Rumana -primer golpe en el costado, hacha de guerra desenterrada- y se aferran sin preguntar ni nada a tu reproductor hasta el día de hoy, haciendo resonar en tus tímpanos día sí y día también su particular garage. Particular, y esto no es fácil, porque suena personal desde el primer minuto. Le pillamos el punto instantáneamente a temas como ¡Sal-va-je! o Cataratas en Montserrat para luego quedarnos con El Gran Hombre o ese canto al amor que es Jessinstein. Mentira, amor del tradicional igual no hay mucho, pues digamos que para Salvaje Montoya todos los días son nochevieja y a ti, bella dama, si te he visto no me acuerdo.

Pero centrémonos. Salvaje Montoya son 4: Valentino Montoya (voz y guitarra), Miguel Ángel Blanca (bajo), Germán Ruíz (guitarra) y Miquel Andreu (batería), publican disco con BCore y Mama Vinyla, se ponen camisas hawaianas y gafas de sol en interiores y esto no es ninguna broma. Lo gozarán los amantes del surf y del garage más clásico, los sencillamente cafres y aquellos/as que buscan un disco que les levante de la silla en 2013. Una de las bandas más excitantes del año, entiéndase como se quiera. 


 Texto de Bruno Corrales
Fotografía: Helena Torrent

0 comentarios :