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Una palmera en tu casa para que veas el mar

Beach Beach + Prisma en Llamas en Wurlitzer Ballroom (15.12.12)

El día que me enteré de que tocaban Beach Beach (en la foto) con Prisma en Llamas en la Wurli, un claro de nubes con música celestial sonó en mi cabeza. Tenía ganas de ver en directo a los primeros, pero sobre todo de repetir con los segundos, teloneros, en este caso, como aquel día -hace ya un año- que acompañaron a Ataque de Caspa en la Siroco. Vaya par de grupos, playeros y de lo fi soleado. ¡qué ganas! Y no nos defraudaron para nada. 

Pablo Santoro (Prisma en Llamas)
Prisma en Llamas abrieron la noche del sábado 15 de diciembre, con su HMS, su guitarra, ukelele y teclado. La mitad del último mes del año. Y nosotros entre pop ruidoso de margaritas y ensaladilla rusa. El sonido de la sala podía haber sido un poco mejor, todo sea dicho. Tocaron un repertorio de canciones que nos recordó al completo su Aeropuerto Extrañamente Blanco (Gssh! Gssh!, 2010), así como su split con Atomizador, que suena mucho más soleado. Siempre con una sonrisa y su normalidad brillando en cada gesto,  nos dieron un taller de pop radical, y dieron paso a Beach Beach

Los de Mallorca nos trajeron las playas de la isla, con mucho buen rollo, ambiente de amigos en el público, y mucho baile. Abrieron repertorio con Easier, y siguieron con más temas de su Tasteless Peace (La Castanya, 2012), así como de su EP Leeuwenhoek+3 (2010). Con un guiño enorme a Aliment en su discografía, lo que mi compañero de concierto y yo destacamos fue sin duda el momento en el que tocaron Trembling, tema corto, intenso, pero que por alguna razón o por otra, destaca y brilla por sí solo, tanto por las voces, como por la instrumentación. Muy elegante.Y cómo no, otro de los picos de la noche fue cuando tocaron ese Plants, pegadizo donde los haya. 

Noche de guitarras tropicales y arena en el suelo. Disfrutable nivel 10 sobre 10. 

Texto y fotografía de Paula Fernández

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